DIBUJOS
EL DÍA QUE PINTÉ LA TRAGÈDIA DE LA BATALLA DE L’EBRE
Un día pedí que me trajeran mis pinturas al oleo y representé lo que viví durante mucho tiempo: La Tragèdia de la Batalla de l’Ebre. Pinté un cuadro en cuyo centro situé la calavera de un chico, un biberón de 17 años, con el casco puesto. En un lado, puse a un pobre soldadito moribundo desangrándose y, en e
La Tragèdia de La Batalla de l’Ebre, de Joaquim Oller, 1939
l otro, una formación rígida de soldados que, bajo el terror impuesto por los comisarios políticos, fusilaban a compañeros por el motivo más insignificante.
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En la segunda foto retrato del cuadro expuesto en el Museo de la Batalla del Ebro. (Fayon)
EL AVIÓN LLAMADO PAVA SE ESTRELLO
Un avión nacional al que nosotros llamábamos la Pava había descubierto nuestras trincheras. A menudo hacía vuelos rasantes sobre nuestras posiciones y nos ametrallaba. Pero un día, la Pava tuvo un problema mecánico y los tripulantes se lanzaron en paracaídas. A medida que iban saltando del avión, se incendiaban y caían al vacío, uno tras otro. La Pava perdía altura y, finalmente, se estrelló y se quemó. Probablemente una bala había agujereado el depósito de combustible del avión. Conservo el dibujo que hice entonces.
CAMILLEROS EN LA SIERRA DE PÀNDOLS
También dibujé a dos camilleros bajando a un herido de la sierra de Pàndols. ¡Ellos también me habían salvado la vida.!
UNIFORMES
Dibujo que hice durante el Servicio miliar, recordando los diferentes uniformes que ví desde 1938 a 1943.
(uniforme tipo ruso, de requeté, y franquista).
NUEVOS VECINOS. FIFA Y SU FAMILIA
En 1940, a nuestro domicilio de Diagonal 345, llegaron unos nuevos vecinos de rellano: la familia judía Rosenkvics, refugiados de Letonia por las persecuciones de Stalin y, posteriormente, de Hitler.
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El 16 de junio de 1940 la URSS invadió Letonia ,Estonia y Lituania, hecho que provocó la huida de numerosas familias de las persecuciones ya que Stalín envió a muchas personas que consideraba sospechosa, de diferir de sus ideas, a Siberia. En Letonia , Stalín envio varios trenes carga , llenos detenidos, a Siberia. En el rellano de nuestro domicilio de la Diagonal 345, se instalaron unos vecinos nuevos: la familia judía Rosenkvics que huyeron de Stalin.
Consiguieron llegar a Barcelona el 1940 y vivieron aquí durante varios años. El padre era muy buen ingeniero y encontró trabajo en el taller Estrada de Sarrià, taller responsable de la construcción del avión del Tibidabo, que hoy todavía da vueltas en este parque de atracciones. La señora Rosenkvics era ama de casa y cuidaba de sus dos hijas. La mayor se llamaba Fifa y acabó convirtiéndose en una gran concertista de piano. La pequeña era Evita y aún estaba estudiando en el colegio.
Nosotros jugábamos mucho con ellas. Hice un dibujo a Fifa, que aún conservo.